Renovación de Kepa
Kepa tenía contrato hasta el mes de junio de 2018, por lo que apenas quedaba tiempo para cerrar un acuerdo. El Real Madrid lo intentó, pero no tuvo suficiente tiempo, dinero, suerte o acierto.
El Athletic de Bilbaco ha sido quien ha convencido al jugador para quedarse nada menos que hasta el año 2025. La firma del contrato implica un contrato de 4 millones de euros por temporada.
Es un salario bastante rentable para un jugador de 23 años, que se asegura su continuidad y constante aumento de reputación deportiva.
Tanto es así, que desde el club rojiblanco han querido garantizar su permanencia mediante una cláusula de rescisión de 80 millones de euros.
El coqueteo con el Real Madrid
La directiva del Madrid quería a Kepa. Zidane, sin embargo, se había mostrado claramente en contra de tener un nuevo portero, dado que considera que tiene suficientes recursos en cuanto a guardametas. Según el técnico el problema del club actualmente es otro.
Aunque al final no se ha consumado la contratación, el Real Madrid tenía opciones de quedarse con Kepa. Eso sí, tenía dos opciones. Podía esperar a que finalizase su contrato en verano, aunque para ello se tendría que arriesgar a que otros clubes ofreciesen una oferta atractiva.
La segunda opción era pagar la cláusula de rescisión. Antes del contrato ascendía hasta los 20 millones de euros. Era una inversión importante para una decisión que no contaba con el apoyo de Zidane, ni lógicamente del resto de la plantilla.
El retraso en la decisión ha acarreado el adelanto del Athletic de Bilbao en la jugado. La renovación ya es efectiva y la cláusula de rescisión ahora cuesta el triple.
